Realmente es difícil poder dar una cotización sin antes ver qué es lo que se tiene que corregir. Es una cirugía muy detallada y es la que más variantes tiene de todas las cirugías realizadas en el rostro. Inclusive se tiene que solicitar estudios de imagen para poder realizar mediciones y después de ello llegar a un adecuado diagnóstico y plan de tratamiento.

Se divide en fases y se explicará a detalle en la consulta, pero prácticamente es 1 semana de cuidados locales y reposo relativo.

Con las técnicas actuales y vanguardistas el objetivo principal es la mínima invasión y que el paciente pueda retornar a sus actividades cotidianas lo más pronto posible. Y con ello la inflamación es bastante controlada.

Por supuesto que sí. Las técnicas han cambiado bastante en los últimos años y todo va enfocado a mejores resultados, más estables y con mayor comodidad para el paciente.